Abraham Rodríguez Martínez recomienda generar consciencia en torno a las aplicaciones que la sociedad utiliza y los datos que en ellas se comparten
Desde que cursó sus estudios de secundaria, Abraham Rodríguez Martínez se relacionó en una serie de competencias involucradas con las ciencias, con la tecnología y la era digital a las que le convocó la Secretaría de Educación Jalisco (SEJ). Los desafíos lo fueron llevando de justa de zona, a nivel municipio, luego estatal, regional y nacional, hasta que en 2024 —ya como estudiante de la Preparatoria de Tonalá de la Universidad de Guadalajara (UdeG)— tuvo la oportunidad de representar a México en Estambul.
En la capital turca, Abraham, de 16 años, participó en la International Junior Cybersegurity Olimpiad en donde obtuvo medalla de bronce. Sobre su trayecto, el alumno del Sistema de Educación Media Superior (SEMS) aseguró que en todas las previas había logrado preseas áureas. En Estambul, el reto se volvió más interesante, por la escala de competencia, por lo tanto, la medalla de bronce significó un excelente aliciente.
Acerca de su proyecto enfocado en la ciberseguridad, afirmó que en su trayecto ha aprendido cosas tan básicas como lo es la creación y el uso de contraseñas fuertes para todas las cuentas que se emplean en el mundo digital (desde redes sociales, hasta en aplicaciones de streaming o de videojuegos), la revisión de los avisos de privacidad, la protección de datos personales o incluso el manejo de la Inteligencia Artificial (IA) como herramienta de apoyo y no como sustituta de funciones humanas.
“Muchas aplicaciones, como las de compras que se han vuelto muy populares recientemente como Temu, Shein y todo eso, tienen en sus términos y condiciones parámetros muy peligrosos como que ellos pueden conocer las numeraciones de tus tarjetas de crédito, los datos y las cuentas de los bancos. Yo no recomendaría que las usaran. Aunque eso no quiere decir que las aplicaciones sean las peligrosas, sino que el tema radica en que, si esas plataformas reciben algún ataque, los datos que están ahí alojados están inseguros”.
En ese sentido, Abraham recomendó que todas las personas revisen los términos y condiciones de todas las aplicaciones a las que entran: “A lo mejor no a detalle, pero sí deben ser conscientes de los resúmenes que ofrecen los servicios o en esos casos usar a la IA para saber los puntos que aceptamos al estar de acuerdo; también recomendaría que creen contraseñas para cada cosa y asimismo que no utilicen un correo para todos los servicios que se adquiera, esto debido a que eso te lleva a tener algún tipo de riesgo: si alguien accede a tu cuenta donde tienes respaldadas tarjetas de crédito y demás servicios, será más fácil acceder a todos ellos con la cuenta de correo en su poder”.
Referente a su tránsito por la Preparatoria de Tonalá, dijo estarlo disfrutando ya que él mismo proviene de una familia de universitarios y estar dentro de la UdeG le llena de orgullo: “el bachillerato es una etapa muy bonita para mí, he conocido a mucha gente que para mí es muy importante y los maestros enseñan cosas que son sumamente valiosas”.
Sugirió a otros jóvenes de su edad que no dejen de hacer aquello que les abre curiosidad, y que no se detengan por miedo o nervios: “que se arriesguen a hacer lo que quieran; los resultados suelen ser muy diferentes de lo que la negatividad sugiere que pueden ser”, sentenció.